Antonio Castillo- Una parodia de principio a fin, eso ha sido la Eurocopa de Austria y Suiza 2008, donde la hipocresía europea, el complejo de inferioridad latinoamericano; que calificaba en sus voceros, los especialistas del futbol de la región, a este evento como " un mundial sin pobres "; que llegó al orgasmo con el pastelerismo venezolano. Tanto el pastelerismo como los calificativos de los " especialistas " menosprecia el futbol de este país y de todo un continente.

Sobre el futbol solo haré una acotación, si en esta Euro vimos lo que será el futuro del futbol a nivel estratégico, presagio un mundial del 2010 más que aburrido. Lo del futuro del futbol lo decían nuestros nacionalistas ( estoy siendo sarcástico ) comentaristas nacionales como internaciones de todo el continente. La realidad, es que si sacas a España, Rusia y Turquia la Euro habría sido tan divertida como una cadena presidencial.

La Hipocresía europea:

Es tan indignante la prepotencia europea; aunque se queda corta ante la falta de dignidad y gentilicio de algunos venezolanos; que no sabía si reirme o enfurecerme al verlos publicitando slogans en contra del racismo cuando ya se aprobó la " Ley del Retorno " que consiste en encarcelar por unos cuantos meses o años a inmigrantes ilegales, muchos sudamericanos, para después devolverlos a sus paises de origen.¿ Que habría pasado si acá se hubiera hecho lo mismo con los inmigrantes europeos, a los que se les trata y se les quiere como venezolanos, aunque muchos no se sientan así ? La realidad es que acá los recibimos con los brazos abiertos y miren como pagan. Esto sin mencionar como tratan a los futbolistas africanos en los estadios.

Pastelerismo:

Personalmente conozco a argentinos de padres italianos, brasileños de padres alemanes, uruguayos con padres portugueses, ecuatorianos de padres españoles. Todos con doble nacionalidad, lo que si jamás he visto a estos amigos personales es hincharle a Italia, Alemania, Portugal o España. Acá hay venezolanos que se sienten españoles y le van a la Madre Patria ( ¿ Madre de quién ? ) porque su tatara tatara abuelo; originario de Villa Arreatza en el País Vasco; vino a Venezuela a encargarse de la Compañía Guipuzcoana, por ende son españoles aunque sean mestizos y muy poco importa si fueron tratados de sudaca en su último viaje a Madrid, trato que recibe por cierto cualquier hijo de españoles que haya nacido en Venezuela.

Es triste dar una vuelta por Caracas en estos días, y no por uno, que si siente los colores patrios, sino más bien por ellos, que sufren, lloran y celebran por equipos y selecciones que no saben de la existencia de unos pasteleros venezolanos. Más bien, recuerdo una vez que en una entrevista a Ronaldo en el Mundial de Francia 1.998, cuando se le preguntó por los fanáticos venezolanos este dijo que ellos no importaban, que ellos juegan es para los brasileños y para más rollo hoy Casillas sin ser tan brutal lo ratifica en Madrid, cuando le dedica la copa a España, sin hacer mención a los españoles, hijos, nietos o bisnietos de españoles en el exterior, si a esos de la hermandad gallega.

Para sus héroes, estos pasteleros no existen, no están sobre este mundo y no entenderían porque le van a España, el Real Madrid o el Barcelona.

Quizás muera sin ver a la vinotinto ganar algo importante, o sin ver a mi club del futbol venezolano sin ganar una libertadores, pero de lo que estoy seguro es que moriré con la frente en alto siendo y sintiendome 100% venezolano y no como Facundo Cabral en esa canción " No soy de aquí ni soy de allá " para los pasteleros, que no son venezolanos ni españoles por convicción propia, acá son españoles y allá sudacas.

No hay nada más triste que no tener identidad.