Estoy aquí escribiendo estas líneas sin tener mucha noción de lo que voy a llevar a cabo y viendo en este momento también que el mundo es muy vasto en diversidad de opiniones y filosofías.

Tal vez por ello hay tantas diferencias y discusiones que llevan a tal extremo a la violencia verbal y física en muchos casos.
Últimamente se preguntaran el por que de estas líneas o el por que de esta reflexiones breves, los cuales denota que somos un poco cojos y un poco locos, y últimamente el país está envuelto en un remolino de emociones que poco antes se veía.

En consecuencia hace diez años tal vez ¿quién sabía de su equipo local o de la Vinotinto o sencillamente había discusión nacional de los errores de un técnico en Venezuela?

Yo no escribiré en estas líneas que si Venezuela juega feo, que el técnico actual lo hace mal o bien o qué partido de la liga local es clásico o no o que la FVF son unos rosqueados o que hay elefantes blancos, negros y rojos, lo que quiero expresar es la ironías de la vida que se ven incluso hasta en el Facebook y twitter.

Al fin y al cabo al ya al ir por este párrafo el que no tenga ni idea de que es este artículo y como una maestra le enseña a su pupilo a como agarrar un lápiz o leer un libro, se los diré a continuación:

Las ironías de la vida han llevado a tal punto que lo incluso hace diez años era impensable ahora es una realidad, crean o no lo crean, en Venezuela ha avanzado y ganado terreno en el futbol como Valentino Rossi coleccionando trofeos mundiales como barajas, quien iba a pensar que justamente eso iba a pasar…… nadie o muy pocos quizá.

El comienzo es tan desconocido como los recuerdos de cada uno de nosotros, como el de nuestro primer biberón o de nuestro primer paseo a la calle, pero existen y definen como somos nosotros, como vamos a crecer y hasta cómo vamos a morir.
Nuestro inicio debemos tratar de encontrarlo por nosotros mismos, no sirve vemos millones de videos de la Vinotinto cenicienta, de la de Paéz o Farias sin preguntarnos lo siguiente a nosotros mismo y ser sinceros:

¿Por qué le voy a la Vinotinto?

Háganlo con conciencia y aunque aparentemente sea una pregunta estúpida, a veces las preguntas estúpidas o simples es más difícil de responder que las de mayor complejidad porque damos por hecho las cosas simples y cotidianas que están en nuestra realidad.